📞 697 96 33 18 | ✉️ idecos@icam.es |
El Procedimiento Ordinario en el Derecho Procesal Español
El procedimiento ordinario o procedimiento sumario es el proceso más completo y formal en el derecho procesal español, diseñado para tramitar delitos graves cuya pena privativa de libertad es superior a los 9 años de prisión.
Este procedimiento se utiliza en aquellos casos en los que la gravedad de los hechos requiere una mayor formalidad y una investigación más exhaustiva, lo que garantiza el respeto al debido proceso y las garantías legales tanto para el acusado como para la víctima.
El procedimiento ordinario está regulado principalmente en la Ley de Enjuiciamiento Criminal (LECrim) y sigue una serie de fases que aseguran una investigación completa, un juicio adecuado y una sentencia ajustada a la gravedad del delito.
En este artículo, exploraremos en detalle en qué consiste el procedimiento ordinario en el derecho procesal español, sus fases, cuándo se aplica y cuáles son sus principales características.
¿Qué es el Procedimiento Ordinario?
El procedimiento ordinario es el proceso penal que se utiliza para juzgar delitos más graves, aquellos cuya pena excede los 9 años de prisión.
Se caracteriza por su complejidad, ya que incluye una serie de fases detalladas y una instrucción extensa para investigar los hechos en profundidad. A diferencia del procedimiento abreviado, el procedimiento ordinario es más largo, pero está diseñado para asegurar que los delitos graves se traten con todas las garantías legales necesarias.
Este procedimiento está diseñado para delitos que afectan gravemente a la sociedad, como los homicidios, agresiones sexuales, secuestros, delitos de terrorismo y corrupción. La estructura de este procedimiento garantiza un análisis minucioso de las pruebas, la participación de todas las partes implicadas y una adecuada defensa del acusado.
¿Cuándo se Aplica el Procedimiento Ordinario?
El procedimiento ordinario se aplica cuando el delito investigado tiene asignada una pena privativa de libertad superior a 9 años, según lo establece el Código Penal. Algunos ejemplos de delitos que suelen tramitarse por este procedimiento son:
- Homicidio o asesinato.
- Agresiones sexuales graves.
- Delitos de terrorismo.
- Secuestro.
- Tráfico de drogas a gran escala.
- Corrupción política.
El procedimiento ordinario también se utiliza cuando el caso implica una gran complejidad, ya sea por la cantidad de delitos cometidos o por la gravedad del daño causado.
Fases del Procedimiento Ordinario
El procedimiento ordinario sigue una serie de fases detalladas que buscan garantizar que la investigación sea completa y que el juicio sea justo para todas las partes. Estas fases son más prolongadas que en el procedimiento abreviado y requieren una participación activa de los actores procesales. A continuación, describimos cada una de las fases del procedimiento ordinario:
Fase de instrucción
La fase de instrucción es la primera etapa del procedimiento ordinario, y está a cargo del juez de instrucción. Durante esta fase, se lleva a cabo una investigación exhaustiva de los hechos para determinar si existe suficiente evidencia para llevar a juicio al acusado. Esta fase incluye:
- Toma de declaraciones de los implicados y testigos.
- Solicitudes de informes periciales, como autopsias o informes médicos.
- Recopilación de pruebas documentales o materiales.
- Detención preventiva si se considera que el acusado representa un peligro para la sociedad o podría fugarse.
La fase de instrucción es clave para el procedimiento, ya que es donde se recolectan la mayoría de las pruebas que se presentarán en el juicio.
Conclusión de la instrucción y apertura del juicio oral
Una vez que el juez de instrucción concluye la investigación, debe decidir si hay suficientes indicios de criminalidad para llevar el caso a juicio oral. Si considera que las pruebas son insuficientes, puede dictar el sobreseimiento (archivo) de la causa. Si, por el contrario, decide que hay pruebas suficientes, dictará un auto de apertura del juicio oral.
En este momento, las partes (fiscalía, defensa y acusación particular) presentan sus escritos de acusación y defensa, donde se detallan los cargos y las penas solicitadas, así como las pruebas que pretenden presentar en el juicio.
Juicio oral
El juicio oral es la fase central del procedimiento ordinario y se desarrolla ante la Audiencia Provincial o la Audiencia Nacional, dependiendo de la gravedad y el tipo de delito. En esta fase se practican todas las pruebas que fueron admitidas, incluyendo:
- Declaración de testigos y peritos.
- Presentación de documentos.
- Alegatos del Ministerio Fiscal, la acusación particular y la defensa.
En algunos casos, si el delito es especialmente grave, el juicio puede celebrarse con la intervención de un tribunal del jurado, formado por ciudadanos que emiten un veredicto sobre la culpabilidad del acusado.
Sentencia
Una vez finalizado el juicio oral, el tribunal o el jurado emiten una sentencia, en la que se puede declarar al acusado culpable o inocente. Si se le declara culpable, se impondrá la pena correspondiente, que puede ser de prisión, multa o cualquier otra sanción prevista por el Código Penal.
Recursos
Las partes que no estén conformes con la sentencia pueden interponer un recurso de apelación ante el Tribunal Superior de Justicia o el Tribunal Supremo, dependiendo de la gravedad del caso. El recurso de apelación permite que una instancia superior revise la sentencia emitida en el juicio.
Características del Procedimiento Ordinario
El procedimiento ordinario se diferencia de otros procesos penales por su extensión y formalidad. Algunas de las características clave de este procedimiento incluyen:
Duración prolongada
Debido a la complejidad de los delitos que se tramitan por el procedimiento ordinario, este proceso suele ser más largo que el procedimiento abreviado. La fase de instrucción puede extenderse durante varios meses, e incluso años, dependiendo de la magnitud del caso.
Intervención del tribunal del jurado
En algunos delitos graves, como los homicidios, puede intervenir un tribunal del jurado, compuesto por ciudadanos que determinan si el acusado es culpable o inocente, aunque la sentencia final la dicta el juez.
Mayor complejidad en la fase de pruebas
La fase de pruebas en el procedimiento ordinario es más compleja, ya que incluye peritajes, pruebas documentales, testigos, y en ocasiones, investigaciones internacionales o interdisciplinarias. Este nivel de complejidad asegura que se considere toda la evidencia disponible.
Posibilidad de penas graves
Dado que el procedimiento ordinario se aplica a delitos graves, las penas impuestas suelen ser severas. En caso de condena, las penas pueden incluir largas penas de prisión, inhabilitaciones o multas cuantiosas.
Ventajas y Desventajas del Procedimiento Ordinario
Ventajas
- Garantía de un juicio justo: El procedimiento ordinario garantiza que los delitos graves sean investigados y juzgados con todas las garantías procesales.
- Acceso a recursos y defensa efectiva: Los acusados tienen derecho a una defensa exhaustiva, con más tiempo para preparar el caso y presentar pruebas.
- Completa investigación: Al tratarse de delitos graves, se lleva a cabo una investigación más exhaustiva, lo que garantiza una mejor evaluación de los hechos.
Desventajas
- Duración prolongada: Este procedimiento puede alargarse durante meses o años, lo que genera incertidumbre y mayores costes procesales.
- Complejidad: La mayor formalidad y el número de pruebas y testigos a presentar pueden complicar la defensa y generar retrasos.
- Exposición mediática: En casos de gran repercusión pública, el acusado puede enfrentarse a una mayor exposición mediática, lo que afecta su vida personal y profesional.
Preguntas Frecuentes sobre el Procedimiento Ordinario
¿Qué es el procedimiento ordinario?
Es un proceso penal utilizado para juzgar delitos graves con penas de más de 9 años de prisión.
¿Cuándo se aplica el procedimiento ordinario?
Se aplica en delitos graves como homicidios, terrorismo, secuestros y delitos de corrupción, entre otros.
¿Cuáles son las fases del procedimiento ordinario?
Las fases incluyen la instrucción, la apertura del juicio oral, el juicio oral, la sentencia y los recursos.
¿Cuál es la diferencia entre el procedimiento ordinario y el abreviado?
El procedimiento ordinario se utiliza para delitos graves, mientras que el abreviado es para delitos menos graves con penas inferiores a 9 años.
¿Puede intervenir un jurado en el procedimiento ordinario?
Sí, en ciertos delitos graves como el homicidio, un tribunal del jurado puede participar en el juicio.
¿Necesitas abogado en un procedimiento penal?
¡No te preocupes!
Estoy aquí para ayudarte.
Como abogado especializado puedo ayudarte en la tramitación de este tipo de procedimientos
¡Contáctame hoy mismo y pongamos en marcha tu Defensa!.